Quienes Somos
Somos una iglesia no denominacional. Somos un lugar en donde creemos que cada persona puede experimentar un avivamiento personal, mediante una relación íntima con el Espíritu Santo.
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Amistad Amor y Avivamiento
Amistad: Porque nosotros somos el punto de contacto para conducir a otros a los pies de nuestro gran amigo y Salvador Jesús
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Amor: Porque Dios es amor y porque el amor es el lenguaje sin fronteras
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Avivamiento: Porque es el fuego del Espíritu Santo que transforma los corazones.
Nuestros Valores
Adorar a Dios
Evangelizar
Discipular a los creyentes
Dios nos creó y diseño a cada uno de nosotros para adorarlo y honrarlo (Is.43:7 TLA) Yo los he creado para que me adoren y me canten alabanzas. El hombre encuentra su plenitud cuando adora a Dios, su Creador. Y el motivo de nuestra adoración es simplemente porque Dios es Real, y su fiel amor permanece para siempre.
La responsabilidad de todo el cuerpo de cristo es comunicar la palabra de Dios a toda aquella persona que no lo conoce. Como iglesia, por experiencia personal, sabemos que solo Dios puede trasformar la vida de las personas atreves del evangelio.
Sabemos que el Reino de los cielos opera aquí en la tierra a través de los hijos de Dios, por la persona del Espíritu Santo. Nuestro propósito como iglesia es enseñar y ayudar a los nuevos creyentes en su crecimiento espiritual. Desarrollar discípulos llenos del Espíritu Santo y de la palabra de Dios para que puedan cumplir con la gran comisión de (Mt.28:19,20) “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones...”
Compañerismo/amor de Dios
Llegar a otros que están experimentando dificultades y necesidades en sus vidas, para ser el medio de bendición, trayendo esperanza y construyendo un puente hacia Cristo.
Lo Que Creemos
La salvación
Creemos que sólo mediante la muerte y expiación de Jesucristo como mediador entre Dios y los hombres, la humanidad puede ser redimida de su condición espiritual. La salvación es por gracia y se recibe por fe en nuestro señor Jesucristo. (2Cor.5:21; Ro.5:1; Ef.2:8-9)
El único Dios verdadero
Creemos en el único Dios verdadero creador del cielo y de la tierra, revelado a sí mismo como el propio existente y eterno YO SOY, manifestado en tres personas – Padre, Hijo y Espíritu Santo. (Dt.6:4; Mt.28:18-19; 1Jn.5:7)
La deidad de Jesucristo
Creemos que el Señor Jesucristo es el eterno Hijo de Dios, la imagen del Dios invisible, quien se despojó de su gloria y se hizo hombre, concebido del Espíritu Santo nacido de una virgen. Se entregó en la cruz y murió por nosotros para el perdón de nuestros pecados, resucitó de los muertos, ascendió al cielo de donde habrá de regresar al final de los tiempos por su iglesia. (Lc.1:30-35; Jn.1:1-2,14; 3:16; Fil.2:5-8; 1T.4:13-18)
El Espíritu Santo y su obra
Creemos que el Espíritu Santo es la tercera persona divina de la trinidad, y fue enviado para habitar, guiar, enseñar y empoderar al creyente, atreves de dones y ministerios divinos para el desarrollo de su Iglesia. (1Cor.12:4-11; Ro.12:6-8, Ef.4:11-12) y convencer al mundo de pecado, de justicia y de juicio. (Jn.16:7)11 Hch.2:1-4)
Las sagradas escrituras
Creemos que la Biblia no contiene la palabra de Dios, sino que es la palabra de Dios inspirada y la regla infalible de fe y conducta de la vida cristiana. (2P.1:20-21; 2Ti.3:16-17)
La Cena del Señor
Creemos en participar de la cena del Señor cuantas veces sea necesario. Qué costa de dos elementos, el pan y el fruto de la vid, el símbolo que expresa nuestra participación es un Memorial de su sufrimiento y muerte. Y la promesa de su segunda venida. Y está destinada a los creyentes hasta que él venga. (Lc.22:17-20, 1Cor.11:24-26)
Sanidad divina
Creemos que la liberación de la enfermedad ha sido provista en la expiación de nuestro Señor Jesucristo y está disponible a todo el que ponga su fe en Cristo Jesús. (Is.53:4-5, Mt.8:16-17, Stg.5:14-16)
La caída del hombre y redención
Creemos que el hombre fue originalmente creado a imagen y a semejanza de Dios y que cayó por el pecado. Como consecuencia de su pecado, el hombre perdió la vida espiritual y murió en sus pecados. Y esta muerte espiritual, es decir, la depravación de la naturaleza humana se ha transmitido a toda la humanidad, y su única esperanza de redención se encuentra en Jesucristo el Hijo de Dios. (Gé.1:26-27; 3:17; 6:5; Ro.5:12; 17-21)
El bautismo en agua
Creemos que todos los que han aceptado a Cristo como su Señor y Salvador deben de recibir el bautismo en agua por inmersión, dando así testimonio público de su fe, de que han muerto al mundo y han resucitado a una nueva vida en Cristo Jesús (Mr.16:16; Hch.2:38; 8:35-38; Ro.6:4)
La Iglesia como cuerpo de Cristo
Creemos que la Iglesia es el santo cuerpo de Cristo, la morada de Dios por el Espíritu Santo, con el encargo divino de llevar a cabo su gran comisión. Cada creyente, nacido de nuevo forma parte integral de la iglesia de Cristo (Ef.1:22-23, 1Cor.12:27, Mt.28:19-20)